Los ministros de Relaciones Exteriores del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA), con excepción del de Nicaragua, pidieron este jueves en San José la restitución del presidente hondureño depuesto, Manuel Zelaya, y reiteraron que no se reconocerá ningún gobierno que surja de la ruptura constitucional.
En un comunicado emitido al término de una reunión de los ministros de Centroamérica y República Dominicana, a la que Nicaragua no envió ni al canciller ni al vicecanciller pese a que el lunes había confirmado la presencia de este último, los ministros reiteraron que "no se reconocerá ningún gobierno que surja de esta ruptura constitucional".
Asimismo dieron su apoyo a la Declaración de San José, propuesta por el mediador de la crisis surgida por el golpe de Estado del 28 de junio, el presidente costarricense Oscar Arias, que prevé la restitución de Zelaya en el poder, así como la creación de un gobierno de unidad nacional.
La canciller de Zelaya, Patricia Rodas, quien acudió a la cita de este jueves, instó a la comunidad internacional que aplique cuanto antes sanciones "contundentes y tangibles" al gobierno de facto de Honduras, y a quienes fraguaron el golpe de estado del 28 de junio.
Rodas agregó que, tras el fracaso de la misión de cancilleres de la OEA que se reunió el martes pasado con el presidente de facto de Honduras Roberto Michelleti, los países latinoamericanos y no solamente Estados Unidos, deben endurecer sus posiciones ante el riesgo de que en el futuro sufran situaciones similares.
"Nosotros consideramos que es necesario una mayor contundencia de la comunidad internacional para que se apliquen sanciones reales, tangibles, al régimen de facto", dijo Rodas a periodistas en la sede de la cancillería costarricense.
"No es un gobierno lo que se ha instalado, es un régimen golpista, por lo tanto deben aplicarse sanciones a aquellos que fraguaron el golpe de estado, que constituyen los pequeños grupos de poder, que son los que monopolizan las actividades productivas y de exportación", puntualizó.
La diplomática también pidió que no se reconozcan las elecciones previstas para el 29 de noviembre.
La ausencia de Nicaragua, que estuvo representada en la reunión por el embajador en San José, Harold Rivas, impidió a los ministros adoptar cualquier declaración oficial. Por lo tanto, estos se limitaron a emitir un comunicado en el que dieron su apoyo a la convocatoria a la Sesión Especial del Consejo Permanente de la OEA, a celebrarse el próximo lunes 31 de agosto de 2009, para que formule nuevas propuestas y acciones tendientes a restablecer el orden constitucional en Honduras.
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