lunes, 20 de diciembre de 2010

Paramilitares del alcalde Ricardo Álvarez agreden EL LIBERTADOR

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El odio manifiesto de Ricardo Álvarez contra los hondureños empobrecidos producto de un sistema político y económico cruel y excluyente que a través de la historia beneficia a pocos y daña a muchos; ese esquema permite una vida de mucha riqueza al alcalde capitalino y al resto de las familias oligárquicas, pero condena a la miseria y a la muerte a la mayoría de hondureños, entre otros, a los campesinos del Aguán.

Redacción / EL LIBERTADOR
redaccion@ellibertador.hn

Tegucigalpa. No cesa la represión contra “EL LIBERTADOR”.  El viernes 9 de diciembre de 2010, cinco paramilitares por órdenes del edil fascista Ricardo Álvarez, intentar boicotear la maratón que impulsa este medio de comunicación a favor de los campesinos y campesinas del valle del Aguán, en el departamento de Colón, ubicado a unos 550 kilómetros al norte de la capital.
Los guardias del alcalde portaban boinas militares, lentes oscuros y armas de reglamento militar; luego este periódico investigo que son elementos de los escuadrones elite de las Fuerzas Armadas denominados “Fuerzas Especiales”.

DENUNCIA INTERNACIONAL
Los paramilitares intentaron agredir a personal de “EL LIBERTADOR” cuando tomaban fotografías y filmaban el abuso de autoridad que estaban cometiendo contra varios ciudadanos que se opusieron a que de nuevo se llevaran los bienes entregados por personas que dijeron presente a la ayuda solidaria.- EL LIBERTADOR ya ha realizado las denuncias ante los medios de comunicación, organizaciones de derechos humanos, y hemos recibido mensajes de apoyo de Europa, el Caribe y Sudamérica; en los mensajes repudian la conducta del alcalde al entorpecer una actividad humanitaria a favor de campesinos que urgen de ayuda, en momentos que se encuentran cercados por el Ejército, paramilitares de Miguel Facussé y la Policía.

ALCALDE DIRIGE EJÉRCITO
5-65.gifEstas acciones no son extrañas. Al filo de las 6 p.m. de ayer (miércoles 8 de diciembre), otro grupo de paramilitares de la Alcaldía de Tegucigalpa se presentó a las instalaciones del periódico, en el centro de la capital, para decomisar equipo del periódico dispuesto para la maratón; también se llevaron víveres y ropa que habían sido recolectadas durante el día.

Sin presentar identificaciones, los militares al servicio del alcalde Álvarez expresaron: “Esto es un decomiso por parte de la Alcaldía Municipal”, y sin decir más, subieron el equipo y los víveres en dos vehículos pick up, marca Nissan Frontier, con vidrios polarizados y sin placas, similares a los usados durante la dictadura de Roberto Micheletti para reprimir al pueblo.

FF. AA. OBEDECEN A FACUSSÉ
En la actualidad, el árabe golpista Miguel Facussé (tío del ex presidente Carlos Flores Facussé) ha orquestado con la obediencia que le rinden las Fuerzas Armadas un bloqueo en las comunidades campesinas del valle del Aguán, a donde no se permite el ingreso de alimentos enlatados, ropa y medicamentos para los campesinos diseminados en esa zona, con el propósito de debilitar física y moralmente a las familias campesinas, sin importarle que ahí residen mujeres, niños y ancianos que están padeciendo hambre y enfermedades.

CALLA EL ALCALDE GOLPISTA
La Alcaldía del Distrito Central no ha hecho ningún pronunciamiento sobre lo ocurrido en las instalaciones de  “EL LIBERTADOR”. El edil Ricardo Álvarez, no da muestras de estar interesado en que los campesinos del Aguán reciban la ayuda que tanto necesitan.
Y esta casa editora entiende que no puede comprender la dimensión nacional, si ha en más seis años ha mostrado una ineptitud extraordinaria para desarrollar el municipio del Distrito Central, que durante su administración se ha deteriorado y Tegucigalpa hoy es la capital del desorden a pesar de los presupuestos multimillonarios que maneja cada año y de los 75 millones de lempiras que la golpista Gabriela Núñez le regalo de manera abusiva durante la dictadura.

Millones de razones fortalecieron el golpismo en Rodrigo Wong Arévalo

imageLa bandera de lucha la define el dinero, así caracterizan las pruebas al director de Abriendo Brecha, abrió la boca y gritó para defender al Presidente Zelaya cuando le otorgó contratos millonarios a través de pauta para Canal 10; pero bastaron cuatro días del golpe para firmar contratos similares de publicidad con el dictador y se transformó en golpista a muerte.
Rodrigo Wong Arévalo es símbolo de hipocresía: Atacó al Presidente Zelaya con lo que éste le otorgó, la frecuencia de canal 10 y contratos de publicidad millonarios; demostró la baja catadura moral al traicionar a la persona que le brindó la mano y al auditorio que por años creyó en que eran auténticos sus sermones y sus poses doctorales.
EL LIBERTADOR tiene en su poder varios contratos y otros documentos que serán publicados en las siguientes ediciones, que dan fe de las relaciones de negocios de Wong Arévalo con el gobierno de Zelaya y con la dictadura liderada por Roberto Micheletti.

Redacción / EL LIBERTADOR

Tegucigalpa. A cuatro días del golpe de Estado, el 2 de julio de 2009, Rodrigo Wong Arévalo cerró el primer contrato millonario para Canal 10 otorgado por el dictador Roberto Micheletti. El acuerdo establece que el costo de la campaña de comunicación denominada “Socialización de Textos Escolares y Comprensión de la Lectura” asciende a un monto total de 10 millones de lempiras, de los cuales Televisión Educativa Nacional (TEN) canal 10, “aportará siete millones” y tres millones pagará la Secretaría de Educación, que en ese momento fungía como titular el golpista Santos Elio Sosa Miranda.
En esos días, mientras Wong Arévalo se lucraba de la dictadura, el pueblo opuesto a la ruptura del orden constitucional era reprimido y asesinados en las calles mientras se movilizada exigiendo que se fuera el usurpador Micheletti y se restituyera en el cargo al Presidente Manuel Zelaya, al que Wong también le había sacado sumas millonarias mediante contrato similares al que firmó con los enemigos de la democracia y vividores eternos de los fondos públicos.

 “SÓLO SON NEGOCIOS”

Las pruebas en poder de EL LIBERTADOR evidencian las motivaciones golpistas de Wong Arévalo, con ello demuestra el cinismo a muerte que lo caracteriza cuando habla de democracia y del pueblo, cuando ha demostrado que el dinero es lo único que le interesa, y no importa si viene de un asesino  como los golpistas; además, quedó constatado que no es amigo de nadie sólo del dinero, porque sin empacho alguno traicionó a “Mel”, que fue quien le concedió la frecuencia de Canal 10 bajo el supuesto que sería un medio de comunicación educativo, pero las pruebas indican que es otro instrumento para concentrar riqueza. Wong no tuvo empacho para atacar a Zelaya, aun cuando meses antes del golpe de Estado le entendía cheques con cifras millonarias para engordar la avaricia de un oriental que vende la imagen de hombre integro y a gritos impone respeto a los telespectadores. La realidad es otra se vende a cualquiera.
Por ejemplo, como buen demócrata se sentó con el dictador Micheletti, reconoció el gobierno de facto y a cambio el tiránico le otorgó un contrato sin licitación, se lo dio de manera directa. Ahora se entiende el odio acérrimo durante la dictadura de Wong contra al otrora protector Zelaya. Como dice el Padrino: “Nada personal, son sólo negocios”.

PACTO DE TRAIDORES

Wong aceptó al dictador y el déspota complacido acordó: “Autorizar a la Secretaría de Estado en el Despacho de Educación para que mediante un procedimiento de Contratación Directa, adquiera los servicios de comunicación, divulgación y publicidad, para desarrollar la campaña… misma que se llevará a cabo en un periodo de seis meses comprendido del 1 de julio al 31 de diciembre del año 2009”. El director de Abriendo Brecha en plena masacre contra el pueblo hondureño, del que tanto se llena la boca todos los días, se dedicaba a sacar dinero de fondos nacionales como el resto de golpistas y, a cambio, se convirtió en un defensor rabioso de la inconstitucionalidad del gobierno tiránico. Meses atrás el mismo Wong miraba con ojos de beneplácito las acciones del gobierno de Zelaya al trasluz de los contratos millonarios que también le regaló muchos millones por el mismo trabajo en el “canal educativo”.