jueves, 7 de marzo de 2013

Un legado a la Autodeterminación de los Pueblos y la Lucha Revolucionaria

En lo personal el legado dejado por Hugo Chavez Frías, va más allá del conocimiento común del cibernauta conformista que con entrar a las redes sociales y repetir lo que otros hábilmente han programado en su poco utilizado cerebro, sienten ser intelectuales.

La comprensión de un Socialismo del Siglo 21, nos habla de una doctrina de Paz, de Libertad y Autodeterminación de los Pueblos, de una enseñanza tremenda que nos dice que los pueblos pueden y deben subsistir con sus propios recursos naturales, que la riqueza de sus valles, tierras, montañas, ríos, lagos y mares debe pertenecer a los pueblos y no a los que más poder tienen a través de la explotación del hombre por el hombre, y entiéndase, trabajo mal pagado, esclavitud, y explotación intelectual yo agregaría la dominación por medio de la religión a pueblos tan miserables que se vuelven a Dios como única respuesta a su sufrimiento temporal, donde mercaderes de la fe se aprovechan de su desdicha.

Debemos recordar que la historia está formada por momentos por tiempos y formas esto para comprender y poder diferenciar el Comunismos Marxista Leninista a esta nueva forma de empoderar al pueblo, El Socialismos del Siglo 21. La dialéctica y la evolución nos dice que el cambio rige al mundo, por tanto a las personas, los procesos de cambio son indetenibles, y solo la aniquilación de las ideas puede acabar con estos, “mi pregunta es” ¿mueren las ideas?

Históricamente los que han detentado el poder han usado la violencia para mantener el statu quo, ellos han creado los monstros y los han soltado, pero la bestia  en la vorágine de su caos se ha vuelto contra sus amos. Algunos ejemplos de los errores históricos cometidos por los que ostentan el poder, los británicos con Gandhi, los racistas con Luther King, los anti comunistas con el Che, Allende en Chile, Torrijos en Panamá, Abraham Lincoln y JF Kennedy en Estados Unidos, Chamorro en Nicaragua, Martí en Cuba, Morazán en Honduras, Bolívar en el Sur, Nelson Mandela en Sud África, y la lista es interminable en la lucha social, que cualquiera diría que luchar por la libertad se los pueblos, solo asegura una muerte violenta, pero estos grandes hombres se han tornado en leyendas, en mitos en ejemplos de vida, sus nombres y sus ideas han trascendido al tiempo.

En Venezuela se inició una revolución que siguió en los países latinoamericanos. Volviendo al legado de Hugo Chavez, lo increíble es que contrario a las teorías Marxistas Leninistas con las que se le equipara, esta revolución no necesito balas, y sus argumentos han sido la paz, la democracia, la igualdad social,  amor por los más necesitados practicada en las urnas, en algunos países como el nuestro la oposición ha sido férrea, en un país donde el 67.8% según la CEPAL vive en pobreza y la tasa de analfabetismo (no sabe leer ni escribir) de personas mayores de 15 años es del 15.6%, según el INE, es incomprensible la resistencia al cambio.

Con esto no ponemos a Chavez a nivel de un santo y mucho menos de un mesías, simplemente un hombre tan común como cualquiera de nosotros, que a diferencia tuvo el valor suficiente de comenzar un proceso en un mundo en el que creímos que las revoluciones ya no tenían cabida y que la globalización comercial nos había absorbido, con su ejemplo se globalizo, la preocupación por los pobres, la necesidad de que todos por igual tuvieran las mismas oportunidades más de 2 millones de niños venezolanos tuvieron la oportunidad de educarse según el escritor Eduardo Galeano.

“Hugo Chávez es un demonio. ¿Por qué? Porque alfabetizó a 2 millones de venezolanos que no sabían leer ni escribir, aunque vivían en un país que tiene la riqueza natural más importante del mundo, que es el petróleo.

Yo viví en ese país alguno años y conocí muy bien lo que era. La llaman la “Venezuela Saudita” por el petróleo. Tenían 2 millones de niños que no podían ir a las escuelas porque no tenían documentos. Ahí llegó un gobierno, ese gobierno diabólico, demoníaco, que hace cosas elementales, como decir “Los niños deben ser aceptados en las escuelas con o sin documentos”. Y ahí se cayó el mundo: eso es una prueba de que Chávez es un malvado malvadísimo.”

Aunado a esa lucha social, nos enseñó una gran lección de valor al enfrentarse a la potencia que para bien o para mal rige los destinos del mundo, me imagino lo difícil que ha de ser enfrentarse a las organizaciones más nefastas de la inteligencia imperialista y sus satélites, me imagino que es vivir con una diana en el cerebro esperando el fatídico disparo.

Sé y no pretendo que compartan este pensamiento, pero sentí la necesidad de escribirlo porque los dones y llamados que nos da el Padre, son irrevocables (Romanos 11:29) y a mí me gusta leer y escribir, será la historia y el tiempo quien juzgue a este personaje amado y vilipendiado por muchos, por ahora el mundo ya lo ha juzgado y son más los que lo aman que los que lo odian o desconocen.