Memorándum revela el modelo de campaña de “respuesta rápida” para apoyar al gobierno de Lobo en Washington
Por Erin Rosa
Especial para The Narco News Bulletin
3 de enero 2011
Más detalles han salido a la luz en relación al ex funcionario de la Casa Blanca del gobierno de Clinton, Lanny Davis (en la foto), sobre su contrato de cabildeo con el gobierno hondureño. En una carta fechada en noviembre pasado dirigida al presidente hondureño Porfirio “Pepe” Lobo y al embajador de ese ese país en Washington, Jorge Ramón Hernández Alcerro, Davis escribe que se enfocará en dos objetivos. Uno busca obtener más dinero de los impuestos de las arcas de los EEUU, y la otra es la estrategia para ahogar reportajes precisos de los medios de comunicación que han sido inconvenientes para el gobierno desde el golpe de Estado del 28 de junio de 2009.
“Gran parte de las dificultades posteriores a los acontecimientos del 28 de junio de 2009 fueron debido a la falta de comunicación instantánea en la administración, así como a los medios de los EEUU (y globales) sobre lo que pasaba en Honduras”, afirma Davis en la carta, que fue incluida en un documento federal obtenido por Narco News.
Antes de ser contratado por el gobierno hondureño en diciembre, Davis trabajaba para el Consejo Empresarial de América Latina después del golpe para promover en Washington los “hechos” y políticas que apoyaban el derrocamiento del presidente democráticamente electo Manuel Zelaya, un acto que fue ampliamente condenado por la comunidad internacional y el gobierno de Obama después de que ocurriera.
Incluso con los incontables reportajes en los medios que documentaron las órdenes del gobierno golpista de facto para cerrar los medios de comunicación y suspender las libertades civiles, en la carta Davis se jacta de haber cabildeado por el “reconocimiento de las próximas elecciones para el nuevo presidente”, el partidario golpista Lobo, que escribe sirvió como “punto clave de inflexión” cuando el Departamento de Estado reconoció los resultados de las elecciones de noviembre de 2009. Bajo el nuevo gobierno de Lobo, existen bien documentadas violaciones a los derechos humanos y asesinatos en contra de organizadores comunitarios y periodistas que continúan impunes.
Con el contrato, los cabilderos darán “informes especiales” a los funcionarios hondureños cada semana o mes, de acuerdo con la carta. Davis propone llevar a cabo reuniones con “editores, reporteros y analistas de opinión en los medios de Washington” para presionar por una nueva narrativa hondureña, lo que incluye preparar a los miembros del régimen golpista antes de que aparezcan ante reporteros.
Davis escribe en el documento federal que por dinero uno de los objetivos políticos clave será el de asistir a Honduras con la renovación de su acuerdo con la Corporación Desafío del Milenio, corporación financiada por el gobierno de los EEUU que es coadministrada por Hillary Clinton. Tras el derrocamiento de Zelaya, la organización continuó dando 6.5 millones de dólares al régimen golpista.
Los servicios le costarán al gobierno hondureño 20 mil dólares por mes, con un contrato que dura hasta finales de marzo. Eso no incluye ni costos de transportación ni viáticos (Davis apunta que prefiere viajar en clase de negocios). Aparentemente este es un precio justo a pagar por el gobierno de Honduras, especialmente si esto significa obtener una mayor parte del dinero de la ayuda exterior estadunidense o para distorsionar la fea realidad de lo que realmente sucede en Honduras.