viernes, 4 de noviembre de 2011



LA CEIBA.- La ciudadanía ceibeña reclama a gritos la operación relámpago. Entre la tarde del miércoles y mediodía de ayer jueves, seis personas perdieron la vida de forma violenta en diferentes sectores.
La lista de fallecidos, inicia con José Nicolás Suazo, de 33 años de edad, quien murió de varios impactos de bala, a las dos de la tarde del miércoles cerca del puente del río Danto donde tenía un puesto de venta de sillas. Las muertes siguieron por la noche, al ser encontrado sin vida José Alexander Duarte, de 30 años de edad. La víctima se desempeñaba como guarda de seguridad de la Standard.

En la madrugada de ayer, la policía tomó nota de tres cadáveres en la Colonia San José, que corresponden a los nombres de: Emilo Oswaldo Munguía, de 44 años de edad, Alirio Romero Zabala, de 33, y Maritza Lozano, de 31, quienes fallecieron producto de múltiples heridas de arma de fuego en diferentes partes del cuerpo.

El sexto en la lista en menos de veinticuatro horas con disparos de pistola, la completa Roberto Rubí Ramírez Martínez, de 41 años de edad, originario en El Progreso, Yoro y residente en Bonitillo. Esta persona falleció de varios balazos en la cabeza.

Según testigos, dos individuos que se conducían en una motocicleta lo abordaron cuando Martínez ingresaba a la colonia en su bicicleta, a la cual le había añadido un troco llevando en su interior varias cajas de refrescos que entregaría a las pulperías de la zona. La policía descarta el robo ya que a la hora de hacer el levantamiento, le encontraron sus pertenencias y el dinero producto de la venta.
Mayoría de policías trasladados del “Cartel de la Granja” desertaron
 
 
Tegucigalpa, Honduras
 
Menos del 50 por ciento del total de elementos que estaban asignados al Distrito Policial 1-6 de La Granja se encuentran actualmente en las instalaciones del Comando de Operaciones Especiales Cobras.
La tarde del miércoles la Dirección Nacional de Servicios Especiales de Investigación (DNSEI) tomó el control de esta unidad por determinación de los altos mandos de la Policía Nacional a raíz del crimen de los estudiantes universitarios Rafael Alejandro Vargas Castellanos y Carlos David Pineda Rodríguez.
Los policías que estaban en turno fueron despojados de sus armas de reglamento, así como de los demás implementos de trabajo, y fueron enviados a los Cobras, donde estarán a disposición de la unidad de Recursos Humanos.
El director de Relaciones Públicas de la Secretaría de Seguridad y Policía Nacional, Silvio Inestroza, confirmó que en total son 176 elementos los relevados del Distrito y de las ocho postas ubicadas en el sur de la capital.
EL HERALDO corroboró la mañana de ayer que solo 81 se habían presentado al escuadrón, mientras que 95 estaban faltistas, aunque unos gozan de sus vacaciones y otros están con incapacidad, según dijo Inestroza.
Ya en horas de la noche, otra fuente policial reveló que solo quedaban 72, porque nueve salieron y, supuestamente, decidieron ya no formar parte de la Policía Nacional.
El director de los Cobras, comisionado Carlos Roberto Aguilera Mendoza, explicó que si un policía no se presenta en el término de 72 horas, cuando sale a disfrutar de su tiempo libre, se le declara faltista.
Si después de ese término no regresan se les suspende el pago de salario y a los ocho días se les hace una audiencia de descargo en ausencia.
Al cumplir los 30 días de ausencia se solicita su cancelación y es separado de su trabajo.
El oficial confirmó que a partir de ayer los policías eran sometidos a evaluaciones físicas y psicológicas, también están dándoles una instrucción o ejercicios de orden cerrado.
"Queremos recuperar la disciplina de ellos, porque sé que algunos andan mal y a partir del lunes se va a iniciar con ellos un curso de actualización policial", expresó.
Por su parte, el titular de la DNSEI, Héctor Suazo, dijo que todos los miembros de la Policía Nacional van a pasar por un proceso, principalmente los de la estación de La Granja.
Explicó que serán sometidos a exámenes médicos, psicológicos, de actitudes y pruebas antidopaje, y serán readiestrados. Una vez finalizado el proceso, los que terminen regresarán a la institución, posiblemente al mismo distrito o a otras estaciones de la capital.
Esto, agregó, con el fin de garantizar que los policías que retornen sean los que realmente quieren a su institución y a su país para las labores de servicios policiales.
En torno a los cuatro policías prófugos, el comisionado Danilo Orellana reveló que manejan información de que dos huyeron hacia Nicaragua, pero que realizan la búsqueda para darles captura.
Aseguró que han hecho coordinaciones con sus homólogos nicaragüenses para que procedan a capturarlos.
EL HERALDO puso al descubierto una red criminal que, por los mismos policías, era conocida como "El Cartel de la Granja".
Esta red se dedicaba al robo de vehículos, asaltos a viviendas, asaltos a mano armada, narcomenudeo, extorsiones y hasta sicariato.

Hallan bomba en estación de La Granja
Las unidades de inteligencia policial realizan las investigaciones de rigor con el fin de establecer la procedencia y quiénes podrían ser los responsables de la colocación de un artefacto explosivo en el distrito policial del barrio La Granja.
La mañana de ayer, policías de la Dirección Nacional de Servicios Especiales de Investigación (DNSEI) descubrieron el artefacto en la segunda planta de la unidad policial, por lo que solicitaron la presencia de expertos del Escuadrón Antibombas.
Con apoyo de un perro especialista en detección de explosivos, los elementos realizaron una inspección para corroborar que no había otro artefacto.
El comisario Javier Díaz Herrera, jefe de la unidad policial intervenida, explicó que se trata de un artefacto explosivo conocido como emulsión, que es de tipo comercial, el cual tenía una mecha lenta y cordón detonante.
Agregó que, supuestamente, los responsables intentaron explotarlo en el interior del distrito.
Prosiguió diciendo que era una carga pequeña, pero que de haber personas cerca podía causar daños severos.
Aseguró que no tienen idea de quién pudo haber colocado la bomba, pero que fortalecerán los sistemas de seguridad interna que tienen en la instalación y taparán las ventanas que están descubiertas.
Confirmó que el paquete estaba en el dormitorio asignado a los policías de Fronteras.
Descartó que los responsables sean los policías que fueron desalojados.

jueves, 3 de noviembre de 2011

Honduras: detienen a 176 policías por supuestos lazos con crimen organizado

Un total de 176 policías fueron detenidos en Honduras por presuntos vínculos con bandas del crimen organizado, informó este jueves el portavoz del ministerio de Seguridad, Silvio Inestroza.

Según Inestroza, los 176 agentes y oficiales fueron detenidos la noche del miércoles y llevados a una posta policial al noroeste de la capital.

Afirmó que todos están aliados con bandas dedicadas al secuestro, robo de carros, sicariato, venta de drogas al menudeo, extorsión y otros delitos propios del crimen organizado.

Inestroza confirmó a la AFP que los detenidos "son 176 porque han sido señalados en esos y otros delitos", y que están siendo investigados por la Fiscalía.

Los 176 detenidos pertenecen a la misma base policial, a la que están adscritos ocho oficiales sospechosos de asesinar el pasado 22 de octubre a dos estudiantes universitarios, uno de ellos hijo de la rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos.

De los ocho sospechosos del crimen, que conmocionó a Honduras, cuatro están en fuga desde hace una semana y los otros cuatro en prisión.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

WikiLeaks Honduras: EE.UU. vinculado a brutales empresarios

Dana Frank
Common Dreams/The Nation
Desde 2009, sin que lo hayan advertido los medios internacionales, el gobierno golpista de Honduras ha estado colaborando con acaudalados terratenientes en una violenta represión contra pequeños agricultores que luchan por sus derechos a la tierra en el valle Aguán, en la región nororiental del país. Más de 46 campesinos han sido asesinados o han desaparecido. Los grupos de derechos humanos acusan de que muchos de los asesinatos han sido perpetrados por el ejército privado de guardias de seguridad empleados por Miguel Facussé, magnate de los biocombustibles. Los guardias de Facussé trabajan en estrecha colaboración con los militares y la policía hondureña, que reciben un generoso financiamiento de EE.UU. para librar la guerra contra la droga en la región.
Nuevos cables de WikiLeaks revelan ahora que la embajada de EE.UU. en Honduras –y por lo tanto el Departamento de Estado– ha sabido desde 2004 que Miguel Facussé es un importador de cocaína. En otras palabras, la “narcoguerra” de EE.UU. se utiliza para, entrenar y apoyar la guerra de un conocido narcotraficante contra los campesinos.
Miguel Facussé Barjum, es según la embajada “el empresario más rico y más poderoso del país”, uno de los “pesos pesados políticos” del país. El New York Times lo describió recientemente como “el octogenario patriarca de una del puñado de familias que controlan gran parte de la economía de Honduras”. El sobrino de Facussé, Carlos Flores Facussé, fue presidente de Honduras de 1998 a 2002. La corporación Dinant de Miguel Facussé es un importante productor de aceite de palma, comida chatarra, y otros productos agrícolas. Fue uno de los partidarios clave del golpe militar que derrocó al presidente democráticamente elegido Manuel Zelaya el 28 de junio de 2009.
La base del poder de Miguel Facussé se encuentra en el bajo Valle del Aguán, donde los campesinos se establecieron originalmente en los años setenta como parte de una estrategia de reforma agraria del gobierno hondureño que alentó cientos de exitosas cooperativas y colectivos campesinos en la región. Desde 1992, sin embargo, los nuevos gobiernos neoliberales comenzaron a promover la transferencia de sus tierras a elites acaudaladas, que se apresuraron a aprovechar el apoyo estatal para intimidar y obligar a los campesinos a vender sus tierras, y en algunos casos para adquirir tierras mediante un fraude evidente. Facussé, de lejos el mayor beneficiario de esas políticas estatales, ahora reivindica por lo menos 8.900 hectáreas en el bajo Aguán, por lo menos un quinto de toda la zona, y en gran parte la ha plantado con palmas africanas para un imperio de biocombustible en plena expansión.
Mientras tanto, los niveles de vida de los campesinos de la región han bajado dramáticamente. En diciembre de 2009 miles de campesinos organizados comenzaron a realizar recuperaciones colectivas de tierras en el bajo Aguán que según ellos les fueron robadas, o prometidas legalmente por el gobierno a través de previos acuerdos o edictos.
Los esfuerzos de los campesinos han sido enfrentados con rápidas y brutales represalias. Según el Comité de Familias de Detenidos y Desaparecidos de Honduras (COFADEH), un grupo independiente altamente respetado de derechos humanos, por lo menos 44 personas han sido asesinadas, 16 solo el verano pasado. Las víctimas incluyen a dirigentes de grupos como el Movimiento Unificado de Campesinos de Aguán (MUCA), que participa en tomas de tierras, pero también a miembros de comunidades estables que han estado en el lugar durante décadas, como Guadalupe Carney, Rigores o Prieta, cuyos residente creían que tenían títulos seguros de propiedad de sus tierras. Según una declaración de Human Rights Watch en la que pide una investigación, nadie ha sido arrestado o enjuiciado por alguno de esos asesinatos.
Muchos de estos asesinatos y ataques se han atribuido a guardias privados de seguridad de Miguel Facussé, así como a sus asociados. Los sicarios van de civil o con uniformes del Grupo Dinant y se dice que son entre 200 y 300. El propio Facussé admite que el 15 de noviembre de 2010 sus guardias mataron a tiros a cinco campesinos del MUCA en la comunidad El Tumbador. Un informe de julio de 2011 sobre las matanzas de campesinos en el Aguán de una misión investigadora del Consejo Mundial de Iglesias, Foodfirst Information and Action Network (FIAN) International, y otros grupos internacionales, señala: “En todos los casos, según testigos y miembros de los movimientos de campesinos, los guardias de seguridad que trabajan para Miguel Facussé y René Morales están considerados los protagonistas primordiales”, incluso en las muertes de tres miembros del MUCA el 17 de agosto de 2010.
Los supuestos asesinatos y ataques armados de guardias de Facussé continúan. El 5 de octubre, se informa de que los guardias de seguridad de Facussé atacaron a tiros e hirieron gravemente a dos miembros del MUCA en la comunidad campesina San Isidro, según FIAN. El 11 de octubre en La Aurora, informan FIAN y otros grupos de derechos humanos, por lo menos seis guardias de seguridad de tierras reivindicadas por la Corporación Dinant de Facussé, junto a policías y fuerzas militares, mataron a tiros a Santos Serfino Zelaya Ruiz, de 33 años, y abrieron fuego contra 15 mujeres que repartían sal, quienes se ocultaron durante horas entre las palmas.
El 8 de enero de 2011, el activista opositor y periodista Juan Chinchilla fue secuestrado en el valle Aguán, torturado e interrogado. Escapó después de dos días e informó en una entrevista que sus secuestradores “llevaban casi todos uniformes del ejército, la policía y de guardias privados de Miguel Facussé”.
Grupos de derechos humanos de todo el mundo han denunciado los ataques de Facussé a los campesinos hondureños. El 8 de abril, el banco alemán de desarrollo DEG (Deutsche Investitions und Entwicklungselleschaft mbH), anuló un préstamo de 20 millones de dólares a Dinant después de investigar la situación. Una semana después EDF, una importante corporación energética francesa, anunció que anulaba sus planes de comprar créditos de carbono a Dinant.
Facussé ha respondido agresivamente en su defensa con anuncios de página completa. También demandó hace poco por difamación al obispo de Honduras Luis Alfonso Santos y a Andrés Pavon, presidente del conocido Comité para la Defensa de Los Derechos Humanos (CODEH).
En tándem con los asesinatos y desapariciones de activistas individuales, la policía y los militares hondureños han lanzado, durante el último año y medio, sucesivas olas de represión contra comunidades campesinas completas, tanto asentadas en nuevos sitios ocupados como en otras estables con un estatus legal a largo plazo. El 15 de diciembre de 2010, entre 500 y 1.000 policías y militares rodearon la pequeña localidad campesina de Guadalupe Carney con francotiradores y helicópteros y realizaron allanamientos casa por casa en busca de supuestas armas, que nunca encontraron. Los soldados se quedaron acampados en el centro del pueblo desde entonces. En abril de 2010, 2.000 policías y militares hondureños ocuparon todo Valle del bajo Aguán, controlando el acceso e intimidando a los residentes.
La situación ha empeorado desde mayo, y sigue escalando. Cinco guardias de seguridad, un policía, y otros cinco, además de 16 campesinos, han muerto. La región está nuevamente ocupada por 1.000 soldados en una operación militar llamada Xatruch II, que apunta a combatir guerrilleros armados, de cuya existencia no existe ninguna evidencia. Tampoco se ha presentado evidencia que vincule a los campesinos con las otras muertes.
En general, la ocupación y represión del bajo Aguán ha llegado a proporciones aterradoras. “Con la militarización Xatruch II tratan de convertir nuestra zona en Iraq”, acusan COFADEH y el MUCA. “Nuestros asentamientos están sometidos a un continuo estado de sitio”.
El 24 de junio, solo con una hora de advertencia, la policía quemó casi toda la comunidad de Rigores de más de 100 casas, de diez años de antigüedad, y aplanó sus tres iglesias y su escuela de siete aulas. Los residentes comenzaron a reconstruir sus casas con carpas y palos, pero entre el 16 y 18 de septiembre, como respuesta a la muerte de un policía cercano, la policía irrumpió en el pueblo, agarrando y deteniendo gente al azar, incluidos niños. Uno de ellos era un niño de 16 años que ha testificado que los policías le pusieron una bolsa sobre la cabeza, lo rociaron con gasolina y amenazaron con matarlo. El 20 de septiembre policías y militares desalojaron exitosamente a todos los que quedaban en la comunidad.
Numerosos testigos presenciales y grupos de derechos humanos informan de que los guardias privados de Facussé, policías y militares, participaron en conjunto en esos violentos desalojos y las muertes asociadas con ellos: en El Tumbador el 15 de noviembre de 2010; en Guadalupe Carney el 15 de diciembre de 2010; en Rigores el 24 de junio de 2011; y en La Aurora el 11 de octubre, donde las mujeres se ocultaron entre los árboles, así como en el secuestro de Chinchilla. El pasado 15 de agosto, informa COFADEH, los guardias de Facussé junto con policías y miembros de las fuerzas armadas atacaron brutalmente a los campesinos en la plantación de palmas africanas conocida como Finca Panamá.
Según Rights Action, un grupo de derechos humanos basado en Washington DC y Toronto, “informa de que militares, policías y fuerzas privadas de seguridad intercambiaron uniformes según el contexto, para movilizarse en conjunto en patrulleros policiales y coches que pertenecen a compañías privadas de seguridad empleadas por los dueños de plantaciones de palmas africanas”. COFADEH concluye diciendo: “La relación entre los militares y los guardias privados de seguridad demuestra claramente que los guardias de seguridad actúan como fuerzas paramilitares”.
En los últimos dos años desde el golpe, el financiamiento por EE.UU. de los militares y policías hondureños ha aumentado drásticamente. EE.UU. ha asignado 45 millones de dólares en nuevos fondos para la construcción militar, incluida la expansión de la Base Soto de la Fuerza Aérea en Palmerola, operada en conjunto (con suministro ahora de drones estadounidenses) y ha abierto tres nuevas bases militares. El financiamiento de la policía y de los militares, casi 10 millones de dólares en 2011, aumentó drásticamente en junio con 40 millones más según la nueva Iniciativa Regional Centroamericana de 200 millones de dólares, supuestamente para combatir el narcotráfico en Centroamérica, que, ciertamente, es flagrante, peligroso y creciente en Honduras bajo el gobierno posterior al golpe de Lobos, especialmente en el Aguán.
Las operaciones militares hondureñas en el valle del bajo Aguán, incluidas operaciones conjuntas con guardias de Facussé, se benefician de estos fondos, así como de un entrenamiento especial. En verano de este año 70 miembros del Batallón Quince de Honduras recibieron un entrenamiento especial de 33 días de los rangers estadounidenses. Según la Red de Solidaridad con Honduras, miembros del grupo Xatruch de Fuerzas Especiales en el valle Aguán, confirmaron en una reunión en septiembre “que habían recibido entrenamiento en operaciones especiales de militares de EE.UU., que incluyó entrenamiento de francotiradores y antiterrorismo”. Testigos presenciales informaron a Rights Action de que también vieron a rangers estadounidenses entrenando a guardias de seguridad de Facussé.
Últimamente, el 6 de octubre, miembros de la Operación Xatruch II, capturaron, detuvieron sin acusaciones y torturaron a Walter Nelin Sabillón Yanos, miembro del MUCA, según informes de FIAN. Sabillón les declaró que mientras estaba detenido en la comisaría Tocoa, las autoridades lo golpearon, le colocaron repetidamente un capuchón en la cabeza y le aplicaron tres veces choques eléctricos en las manos, el abdomen y la boca mientras lo interrogaban sobre el movimiento campesino.
El 17 de septiembre llamé a la comisaría Tocoa para preguntar por la situación de mñas de 30 campesinos que habían sido reunidos y detenidos. “Díganle que matamos a todos los campesinos”, dijo riendo el oficial, y colgó. A una colega que llamó poco después le dijeron que trataban a los detenidos “como perros”. “¿Los están torturando?” –preguntó. “Espero que así sea” –respondió el oficial.
Cables publicados el 30 de septiembre por Wikileaks aclararon aún más el papel de los militares de EE.UU. y del Departamento de Estado en el conflicto del valle Aguán. Un cable del 19 de marzo de 2004 de la embajada de EE.UU. en Tegucigalpa, titulado “Avión con droga quemado en destacada propiedad hondureña” informa de que “un conocido vuelo de tráfico de droga con un embarque de 1.000 kilos de cocaína de Colombia… aterrizó exitosamente el 14 de marzo en la propiedad privada de Miguel Facussé”. Según el autor del cable, el embajador Larry Palmer, las fuentes informaron a la policía de que “el alijo se descargó en un convoy de vehículos protegido por casi 30 hombres armados”. Vieron como quemaban el avión y sus restos enterrados posteriormente por un “buldócer/cargadora frontal”.
Palmer escribe que “la propiedad de Facussé está fuertemente protegida y la posibilidad de que los individuos hayan podido acceder a la propiedad, sin autorización, utilizado la pista de aterrizaje es cuestionable”. Una fuente “afirmó que Facussé estuba presente en la propiedad cuando tuvo lugar el incidente”.
El embajador Palmer también informó de que “este incidente marca la tercera vez en los últimos quince meses en la que se han vinculado narcotraficantes con la propiedad del señor Facussé”. En un cable subsiguiente del 31 de marzo de 2004, Palmer señaló la confiscación de “aproximadamente 700 kilos de cocaína” por las autoridades hondureñas y transmitió su opinión de que la droga podría haber provenido del avión quemado en la propiedad de Facussé.
El 22 de febrero de 2009 –cuatro meses antes del golpe– El Heraldo, un periódico derechista de Tegucigalpa, informó de que, según un funcionario de la oficina antinarcóticos del gobierno hondureño, un avión Cessna con 1.400 kilos de cocaína se había encontrado en Farallones, al este del valle Aguán en el departamento de Colón, “en una pista de aterrizaje que según nuestra información pertenece a Miguel Facussé”. Parece seguro presumir que la embajada de EE.UU. lee El Heraldo a diario y cuidadosamente.
Otros cables publicados por WikiLeaks establecen que funcionarios de la embajada se reunieron con Miguel Facussé en junio de 2006 y el 7 de septiembre de 2009, diez semanas después del golpe, y que la embajada almorzó con Facussé y Rafael Callejas, otro de los poderosos respaldos del gobierno golpista.
Una nueva embajadora estadounidense, Lisa Kubiske, llegó a Honduras en agosto de este año. Es experta en biocombustibles, el centro del imperio de palmas africanas de Miguel Facussé.
¿Qué quiere decir todo esto, entonces? Primero, la embajada de EE.UU. se reunió por lo menos dos veces con un conocido y destacado narcotraficante. Segundo, sabía que respaldó el golpe mientras se desarrollaba, como si fuera solo un “destacado empresario”.
Tercero, y lo más importante, EE.UU. financia y entrena a militares y policías hondureños que realizan operaciones conjuntas con los guardias de seguridad de un conocido narcotraficante, para reprimir violentamente a un movimiento campesino por cuenta de las dudosas reivindicaciones de Facussé de vastas áreas del valle Aguán, a fin de fortalecer su imperio de palmas africanas.
El actual presidente hondureño, Porfirio Lobo, estuvo en Washington durante la primera semana de octubre. Pregonó su compromiso con la defensa de los derechos humanos y la lucha contra la droga, con plena aprobación del presidente Obama. En realidad, ambos aseguran la cobertura y el apoyo a una guerra contra campesinos empobrecidos, para promover los intereses económicos del hombre más rico y poderoso de Honduras.
Copyright © 2011 The Nation
Dana Frank es profesora de Historia en la Universidad de California, Santa Cruz, y autora de Bananeras: Women Transforming the Banana Unions of Latin America que se concentra en Honduras, y de Buy American: The Untold Story of Economic Nationalism. Actualmente escribe un libro sobre la intervención de AFL-CIO durante la guerra fría en el movimiento sindical hondureño.
Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens

sábado, 9 de julio de 2011

No soy de aqui, ni Soy de alla

Los Pendejos, acá hay muchos Facundo

Asesinan en Guatemala cantautor argentino Facundo Cabral

GUATEMALA (AP) — El cantautor argentino Facundo Cabral murió el sábado tras ser blanco de un atentado a tiros cuando se trasladaba hacia el aeropuerto para abandonar Guatemala, en donde había ofrecido varios conciertos la última semana.
El vicepresidente Rafael Espada declaró a la radio Emisoras Unidas "estamos bien preocupados, es una situación muy seria", refiriéndose al asesinato del artista.

"Las instituciones de inteligencia y seguridad ya están trabajando" en busca de esclarecer el atentado, dijo Espada.

El vocero de la policía, Donald González, declaró que se encontró uno vehículo abandonado en una salida de la carretera a El Salvador que aparentemente participó en el ataque porque mostraba varios disparos en su carrocería y dentro había casquillos de municiones de fusil.

Indicó que fueron designados tres equipos de investigadores, que se están registrando vehículos en retenes en toda la ciudad y viendo las grabaciones de varias cámaras colocadas cerca del lugar en donde ocurrió el atentado.

El noticiero Notisiete mostró imágenes del cuerpode Cabral en el vehículo en que se transportaba, una camioneta agrícola blanca que intentó resguardarse de los atacantes dentro de una estación de bomberos. El vehículo con el cantante iba además resguardado por otro en el que viajaban guardaespaldas. El músico estaba en el asiento del copiloto, vestía pantalones vaqueros, una chaqueta de piel y una pequeña maleta en sus manos.

El vocero de los bomberos municipales, José Rodríguez, declaró que el músico argentino recibió al menos ocho disparos en el cuerpo.

También el empresario Henry Fariña, quien contrató al artista, resultó herido y fue trasladado a un hospital en estado delicado, dijo Rodríguez.

El ataque se produjo en un sector conocido como El Trébol.

El asesinato desató una ola de indignación en el país y a nivel internacional. La premio Nobel de la Paz 1992 y candidata presidencial Rigoberta Menchú, quien dijo haber tenido una amistad con el trovador, acudió a la escena del crimen.

Entre llanto, Menchú expresó que "para mi Facundo Cabral es un maestro... amó mucho a Guatemala, me dedicó frases maravillosas en su música".

"Hoy estamos repudiando un crimen más que enlutece a Guatemala... un crimen más que está causando horror y miedo, no dejo de pensar que fue asesinado por sus ideales, no hay ninguna razón por la que tuviera que ser asesinado aquí en Guatemala", añadió la Nobel, que calificó el asesinato como una expresión del "odio del fascismo".

Las redes sociales se llenaron de mensajes de repudio, las fotos de los perfiles en Facebook de docenas de guatemaltecos fueron sustituidas por listones negros y se podían leer mensajes como el que publicó el ex director de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado Ronatlh Ochaeta: "siento una inconmensurable vergüenza!! una profunda rabia por mi país... asesinaron a Facundo Cabral a pocas cuadras de llegar al aeropuerto".

El cantante y compositor Alberto Cortez, entrevistado por la radio colombiana Caracol, expresó su tristeza "ante la noticia tan terrorífica que hemos recibido".

"Uno no sabe porqué suceden esas cosas, pero suceden y entonces no encuentra consuelo", agregó Cortez, quien grabó junto a su colega y amigo el disco "Lo Cortez no quita lo Cabral" que promocionaron juntos en una larga y exitosa gira internacional.

"Facundo era un hombre místico, un hombre de paz, un hombre tranquilo, un hombre que no insultó nunca a nadie", aseguró Cortez.

La agencia de noticias argentina DyN reportó desde Buenos Aires que el presidente guatemalteco Alvaro Colom se comunicó con su colega argentina Cristina Fernández para informarle del asesinato, que a su parecer "fue todo planificado".

Cabral tenía 74 años y ofreció su último concierto el jueves en la ciudad de Quetzaltenango, a 200 kilómetros al oeste de la capital.

El artista se consideraba a sí mismo "un contador de historias que además canta" y fue autor de temas como "No soy de aquí ni soy de allá", el cual cantaron figuras como Vicente Fernández, Julio Iglesias y Lola Flores y del que, según el autor, existen cerca de 700 versiones en 27 lenguas.
Hizo dúos con compositores como Pedro Vargas y Neil Diamond.

Oriundo de la Patagonia argentina, Cabral relató a la AP en una entrevista en Miami en el 2008 que a los nueve años caminó 3.000 kilómetros hasta que llegó a Buenos Aires buscando un trabajo para su madre, con la que quedó junto a seis hermanos después de que su padre los abandonó.

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) declaró al músico argentino como "mensajero de la paz" en 1996, algo de lo que dijo sentirse orgulloso.
En sus conciertos, además de interpretar sus canciones, deleitaba al público con anécdotas y lo inspiraba con una filosofía en la que proclamaba amar a la vida a pesar de las peores adversidades.

Solía citar a escritores como Walt Whitman y Jorge Luis Borges.

En 1976 dejó Argentina en medio de la dictadura militar y se radicó en México.

"Todos los días me siento en el sillón y doy gracias a la noche", manifestó Cabral en la entrevista del 2008. "Siempre le pregunto a Dios, ¿por qué a mí tanto me diste? Me diste miseria, hambre, felicidad, lucha, luces... vi todo. Sé que hay cáncer, sífilis y primavera, y buñuelos de manzana", dijo el cantante en esa oportunidad.

Fue analfabeta hasta los 14 años, pero después conoció a Borges, Chagal y la madre Teresa, contó en esa oportunidad.

Entre los discos que grabó figuran "Mi vida", "Ferrocabral", "Facundo secreto", "Lo Cortez no quita lo Cabral", "Cabralgando" de los que se extraen temas como "Yo quiero ser bombero" y "Pobrecito mi patrón".

"Amo tanto la vida porque me costó tanto gozarla ... me costó mucho sentir que era protagonista y no una basura", relató el músico y escritor, cuya mujer e hija murieron en un accidente aéreo, perdió la vista totalmente durante una época de su vida y que sobrevivió a un cáncer.

Asesinan a Facundo Cabral en Guatemala

MÉXICO, D.F. (apro).- El cantautor argentino Facundo Cabral fue asesinado esta madrugada por un grupo de sicarios en la capital guatemalteca, cuando se dirigía con su representante al aeropuerto internacional La Aurora desde el hotel donde se hospedaba.

El portavoz de la Presidencia guatemalteca Ronaldo Robles, dijo que Cabral, de 74 años y quien se encontraba en Guatemala desde hace una semana, murió como consecuencia de múltiples disparos y que los miembros de su seguridad no pudieron repeler el ataque.

“Fue un atentado directo en su contra perpetrado por sicarios que utilizaron fusiles de asalto”, precisó Robles.

El funcionario aseguró que el presidente guatemalteco, Álvaro Colom, “está consternado por este hecho cobarde”, y aseguró que tres equipos especializados de investigadores han sido asignados para trabajar en el esclarecimiento del asesinato del cantautor y poeta.

En el ataque también fue herido de gravedad el representante del cantante, Henry Fariña, quien se debate entre la vida y la muerte en un centro asistencial de la capital guatemalteca.

Medios locales que citan a testigos presenciales del ataque aseguran que los sicarios iban en dos vehículos de modelo reciente, y que los integrantes del equipo de seguridad del cantante se enfrentaron a tiros con éstos cuando intentaban detenerlos.

El vehículo en el que viajaba el trovador argentino quedó estacionado en la entrada de una estación de bomberos, a donde el conductor acudió en busca de ayuda.

Facundo Cabral, quien inició su carrera artística a los ocho años de edad, nació en la ciudad de La Plata, en la provincia argentina de Buenos Aíres, el 22 de mayo de 1937.

El autor de la mundialmente famosa canción “No soy de aquí, ni soy de allá”, entre otras decenas de composiciones, en su último y fatal viaje a Guatemala ofreció dos conciertos en los que fue aplaudido por centenares de seguidores, uno en la capital y el último, la noche del viernes, en la ciudad de Quetzaltenango, al oeste del país.

miércoles, 1 de junio de 2011

Defiende Venezuela necesidad de luchar contra impunidad en Honduras

Washington, 1 jun (PL) Tras aprobarse el reingreso de Honduras en la OEA, Venezuela defendió hoy la necesidad de darle mayor fuerza a la lucha contra la impunidad y las violaciones de los derechos humanos en ese país centroamericano.

  En su intervención ante la Asamblea General de la Orga nización de Estados Americanos, el canciller Nicolás Maduro expresó que su país considera importante alcanzar un acuerdo unánime sobre el tema de los Derechos Humanos en Honduras.

Maduro precisó que Venezuela votó con reservas porque los responsables del golpe de junio de 2009 siguen impunes y es preciso hacer justicia.

Intentamos proponer en la resolución algunos elementos que dieran mayor garantía a los esfuerzos contra la impunidad, pero no fue posible por cuestiones de tiempo, agregó.

En tal sentido llamó a la comunidad internacional a revisar el cumplimiento del acuerdo firmado en Cartagena de Indias, en el cual quedó establecido el resguardo a los derechos humanos y la condena a la impunidad en esa nación.

Maduro ratificó la voluntad del gobierno venezolano para ayudar al pueblo hondureño y a América Latina en aras de avanzar hacia un proceso de reconciliación y el fortalecimiento de la democracia.

Este miércoles, Honduras reingresó al organismo hemisférico con 32 votos a favor y uno en contra, Ecuador, después de 23 meses de suspensión por el golpe militar contra el presidente constitucional Manuel Zelaya en 2009.

Honduras: la crisis que la OEA no resuelve

¿Realmente necesitaba Honduras regresar a la Organización de Estados Americanos (OEA)? Es una pregunta que muchos se hacen en ese país centroamericano, que durante casi dos años permaneció semiaislado de la comunidad internacional después de que fue excluido del organismo, en julio de 2009.
Una situación que recién concluyó, cuando en una asamblea extraordinaria 32 estados miembros de la OEA aprobaron su reingreso a la organización. Sólo Ecuador votó en contra.

Según analistas, entre los ganadores aparecen desde el presidente de Honduras Porfirio Lobo, hasta los mandatarios Hugo Chávez y Juan Manuel Santos, de Venezuela y Colombia, que ayudaron en el regreso del depuesto Manuel Zelaya a su país, un tema que facilitó el retorno a la organización.Algunos creen que la readmisión normalizará el flujo de préstamos e inversiones, semicongelados desde el golpe de Estado en junio de 2009, pero otros ven en este proceso un asunto político ajeno a los hondureños.
Pero a los habitantes de ese país volver a ser parte de la OEA no marca diferencia en su vida cotidiana, le dice a BBC Mundo el analista Guillermo Molina Chocano.
"La población lo ha tomado con escepticismo porque no es un tema que apasione. La OEA no ha sido un organismo favorable a Honduras, en términos generales, y la gente más bien piensa que se exageró el énfasis del presidente Lobo para regresar a toda costa", explica.

¿Crisis?


Después del golpe de Estado algunos países y organismos financieros internacionales aplicaron sanciones económicas a Honduras.
Decenas de proyectos financiados por el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo fueron congelados durante varios meses, mientras que organismos como Petrocaribe y el Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) cancelaron la participación del estado hondureño.
La suspensión de la ayuda internacional agudizó la crisis financiera en el país. El PIB cayó 2,5% en 2009, en parte por la crisis política derivada del golpe de Estado, según informes de la Comisión Económica para América Latina (Cepal).
En un país donde al menos el 59% de la población es pobre, el impacto de las sanciones fue, sobre todo, en la vida cotidiana de la población, reconoce Molina Chocano.
"La gente lo vio como un castigo al país, a la población, y no tanto al gobierno, que siguió funcionando con sus presupuestos e ingresos", cuenta.
Pero la economía se mantuvo estable por varias razones: el financiamiento desde Estados Unidos –del gobierno y grupos afines a las nuevas autoridades hondureñas- nunca se detuvo por completo, y además el BID y el BM reactivaron los préstamos desde marzo de 2010.
Así, el panorama empezó a mejorar relativamente. En su último reporte financiero el gobierno de Honduras reconoció que el PIB creció más de 2% en 2010.

La política

Aunque los números mejoran, la situación política no parece seguir ese camino, insisten los analistas.
El investigador Marco Gandásegui, de la Universidad de Panamá, dice que el regreso del ex presidente Zelaya podría reactivar la tensión que existía antes del golpe de Estado.
"Para el gobierno de Honduras el regreso a la OEA tiene un costo: reconocer al Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) que tiene en Manuel Zelaya un líder fuerte", dice en conversación con BBC Mundo.
Los integrantes del movimiento han conformado una alternativa real a las opciones políticas tradicionales de ese país, los partidos Liberal y Nacional, explica el analista.
El regreso a la OEA tuvo, además, un efecto regional, añade Gandásegui: la ganancia política de los presidentes Chávez y Santos, garantes del Acuerdo de Cartagena de Indias, que facilitó el regreso de Zelaya a Honduras.
"Sacaron provecho de la crisis porque permitió alcanzar acuerdos que superan la crisis hondureña. Como si estuvieran debajo de un árbol de mango y les cayera un fruto, fue suerte", asegura el investigador.
La OEA también sale bien librada, añade Gandásegui, pues parece demostrar que pudo resolver la crisis hondureña sólo con ayuda latinoamericana, con poca intervención del gobierno de Estados Unidos.

Eurodiputado felicita Zelaya por regreso a Honduras

Bruselas, 1 jun (PL) El eurodiputado Willy Meyer felicitó al expresidente de Honduras, Manuel Zelaya, por su reciente regreso al país "y por el hecho de que éste pueda participar en futuros procesos electorales".

  El también coordinador de Política Internacional del partido español Izquierda Unida se desplazó al país centroamericano justo después del golpe de Estado perpetrado en junio de 2009 contra el presidente constitucional.

Meyer comprobó in situ las violaciones de derechos humanos cometidas por el gobierno golpista, informó la oficina del parlamentario mediante un comunicado de prensa.

Durante todo este tiempo, Meyer ha denunciado el continuo goteo de asesinatos de miembros del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) en Honduras.

Conforme al comunicado, publicado en Internet, estas violaciones de los derechos humanos también persistieron durante el gobierno de Porfirio Lobo, derivado de un proceso electoral organizado por los golpistas, no reconocido por parte de la comunidad internacional.

Meyer, que a su vez es vicepresidente de la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana, ha valorado el retorno de Zelaya como "un paso en la buena dirección hacia el restablecimiento de la normalidad democrática en Honduras".

Por ello, ha celebrado el Acuerdo de Cartagena de Indias, por el cual se garantiza, además que éste no sea perseguido judicialmente y que pueda actuar políticamente a través del FNRP.

Embajada de EUA trató de detener el golpe de Estado contra Zelaya

Rodrigo Baires Quezada

Publicado el 31 de Mayo de 2011
Micheletti, que siempre negó ser golpista, informó a la embajada estadounidense que buscaba sacar de la presidencia a  Zelaya, tres días antes del golpe de Estado. El embajador estadounidense instó al presidente del Congreso Nacional hondureño a evitar poner en riesgo el orden constitucional de Honduras e hizo gestiones para evitar un choque de poderes.
Roberto Micheletti, entonces presidente del Congreso Nacional de Honduras, lo tomó como una deferencia. Llamaba para informar que se votaría en el pleno la destitución del presidente hondureño Manuel “Mel” Zelaya. Hugo Llorens, embajador de Estados Unidos, tomó la llamada como una advertencia de que se pondría en peligro el orden constitucional de este país centroamericano y abogó ante Micheletti porque se frenara toda acción del Congreso en ese sentido.
La recomendación hecha por Llorens es parte de lo relatado por el embajador en el cable 214237, catalogado como “Confidencial” y girado a Washington D.C. a las 8:11 de la mañana del 26 de junio de 2009. Según relata el embajador, quien firma la correspondencia, “la noche del 25 de junio, el Congreso Nacional estuvo a punto de llevar a votación la destitución del presidente Zelaya”. La acción fue tildada por Llorens como “precipitada” porque podría “sumir a Honduras en una profunda crisis constitucional”.
Según el cable, Micheletti llamó a Llorens “para informarle que, con el fuerte apoyo de los partidos políticos de Honduras (incluyendo los dos grandes partidos, Liberal y Nacional), el Congreso Nacional ha iniciado un debate formal que considera refmover al presidente Zelaya de su cargo”. Para ello, Micheletti aseguró que el Congreso revisaría y deliberaría sobre violaciones legales cometidas por Zelaya y su gobierno durante su mandato, iniciando con la remoción del jefe de las Fuerzas Armadas Honduras, Romeo Vásquez, acción que había sido “el catalizador” para que el Congreso tomara esta decisión.
La destitución de Vásquez, el 24 de junio, había acelerado todo un proceso que la embajada había intentado frenar durante todo junio de 2009, mes en que había iniciado conversaciones con diferentes actores políticos y militares de Honduras. Incluso, Llorens desayunó el 18 de junio con Romeo Vásquez y Miguel García Padgett, jefe del ejército. El embajador tenía como misión dar a conocer, en los términos más enérgicos, las preocupaciones de su gobierno “sobre los rumores de que los militares se moverían en contra del gobierno (de Zelaya) si los políticos de Honduras no llegaban a un consenso sobre la legalidad de la votación” para destituirlo. Según el cable 212871, el embajador dijo a los dos jefes militares que el gobierno de Estados Unidos y la comunidad internacional condenarían cualquier movimiento inconstitucional contra Zelaya y que hacerlo representaría un retraso de varios años para la institución castrense.
En el resumen de la epístola, Vásquez aseguró al embajador “que los militares no harían ningún movimiento en contra del gobierno, a pesar de admitir que había amenazado en privado con hacerlo con el fin de ejercer presión sobre los políticos para que llegaran a un consenso”. Con anterioridad, “los líderes militares han dicho, tanto a políticos de alto nivel de los dos partidos políticos más importantes de Honduras, que si no se encuentra una resolución tal vez tengan que tomar medidas no especificadas contra el gobierno de Zelaya”.
Según este cable, se había recibido información de altos oficiales militares de que se consideraba “la creación de una junta administrativa hasta que se celebren las elecciones para un nuevo presidente y para el Congreso, en diciembre”. Vásquez admitió al embajador que las amenazas se hicieron pero dijo que su objetivo era forzar a los políticos a que llegaran a un acuerdo.
El acuerdo nunca llegó y el 25 de junio, desde el Congreso Nacional, los partidos empezaron a mover los hilos de una posible destitución. Para cuando Micheletti se comunicó con Llorens, la “decisión” del Congreso Nacional ya era de dominio público de otros actores políticos de Honduras. Ese mismo día, en horas de la tarde, el presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Jorge Rivera Avilés, dijo el embajador que “estaba extremadamente preocupado acerca de las acciones planificadas del Congreso contra el presidente”. El titular de la Corte le adelantó que diferentes líderes del Congreso se le había acercado y discutido sus planes para remover a Zelaya de su cargo. Él, aseguró a Llorens, aconsejó no realizar dicha acción porque era ilegal.
Bajo las leyes hondureñas, desde 2005 -cuando se derogó la Ley de juicio político-, el Congreso Nacional no tiene la potestad de remover al presidente de su puesto. El mismo Rivera Avilés se lo explicó a Llorens: “En la actualidad, el único medio para remover a un presidente es a través de la presentación de un caso criminal por el Ministerio Público (Fiscal General) ante la Corte Suprema. En tales circunstancias, la Corte nombrará a un magistrado para conocer del asunto. Una sentencia del juez representa el único medio legal para separarlo de su oficina.”
En ese sentido, el único camino que quedaba era esperar que Zelaya insistiera en realizar el plebiscito, una acción que un juez ya había declarado ilegal y, tras cometer un delito, perseguirlo penalmente.
Micheletti parece que no conocía las leyes a las que hizo referencia Rivera Avilés y, ya en horas de la noche, aseguró al embajador que “creía que tenía los votos necesarios para tomar esta medida definitiva (la remoción de su cargo) contra el presidente” y que buscaba que “Estados Unidos estuviera informado de las deliberaciones del Congreso y de la probable acción” a tomar.
La posición de Llorens, a la luz de los cables revelados por WikiLeaks, fue la de tratar de evitar un choque entre los poderes Legislativo y Ejecutivo en Honduras. El embajador respondió que la opinión de la sede diplomática era que la acción “parecía totalmente prematura, era peligrosa y podría precipitar una grave crisis constitucional en Honduras con resultados inciertos”; y adelantó que cualquier medida del Congreso en contra de un presidente electo democráticamente “podría ser vista de una manera muy crítica por muchos en la comunidad internacional”.
Micheletti defendió su postura y respondió que Zelaya estaba empeñado en derrocar al sistema democrático hondureño, que ese mismo día había amenazado con cerrar el Congreso y ponerlo a él en la cárcel. “Micheletti apreció los consejos honestos del embajador, pero consideraba que el momento de tomar la decisión había llegado”, relata el cable.
El embajador estadounidense era consciente de los problemas para llegar a acuerdos entre Zelaya y sus opositores. Él mismo había organizado cuatro reuniones –el 17, 19, 20 y 22 de junio- en su residencia para tratar que el presidente se pusiera de acuerdo con los líderes del Partido Liberal y formar un consenso sobre la consulta del 28 de junio. El mismo 25 de junio, Llorens daba cuenta en el cable 214001 al Departamento de Estado en Washington D.C. que había “instado a Zelaya acancelar los comicios y alentado a otros líderes políticos y militares para mantener la calma”. A pesar de ello y tras las reuniones, la embajada tenía claro que Zelaya no estaba dispuesto a ceder ante sus opositores aun cuando la consulta del 28 de junio hubiera sido declarada ilegal.
Tras la comunicación de Micheletti, Llorens llamó al candidato presidencial del Partido Liberal, Elvin Santos, y al ex presidente hondureño Carlos Flores. Para ambos, según se lee en el cable, la decisión del Congreso era “irracional” pero concordaban en que el deseo de Zelaya de llevar a cabo la encuesta del 28 de junio y remover a Vásquez había alterado los ánimos de algunos congresistas.
“Más tarde esa noche nos enteramos de que, tras las consultas privadas entre los líderes de las distintas partes y de los partidos, se alcanzó un acuerdo para evitar una votación sobre si se debía remover al presidente”, reza el cable. En su lugar, los congresistas votaron para iniciar investigaciones formales contra Zelaya por actos de corrupción.
En una entrevista concedida ayer, 30 de mayo, al medio estadounidense Democracy Now!, el mismo Manuel Zelaya comenta estos cables obtenidos por WikiLeaks y reconoce que el embajador Hugo Llorens trabajó para impedir el golpe del 25 de junio, y trató de frenar el del 28. Aunque asegura que "cuando vio que no podía, se hizo a un lado". "No sé si con órdenes del Departamento de Estado", dice Zelaya, que atribuye a otras instancias políticas estadounidenses, ajenas a la embajada, una fuerte responsabilidad en el golpe de Estado.
Como mínimo, Llorens hizo una mala la lectura de cómo terminaron los acontecimientos de ese 25 de junio de 2009. “Afortunadamente, la decisión de los líderes del Congreso para retirarse del borde de una crisis constitucional proporciona un alivio que se espera que puedan ayudar a aliviar las tensiones”, se lee en el comentario de su cable del 26 de junio. Dos días después, Zelaya amanecía en San José, Costa Rica, después de haber sido sacado por la fuerza de Honduras por elementos de ejército. Ese mismo día, Micheletti asumía como presidente de facto en una sesión en la que el secretario del Congreso leyó una supuesta carta de renuncia de Zelaya, cuya autenticidad fue negada inmediatamente por el derrocado.
Micheletti y los otros implicados en el golpe siempre negaron que hubiera alguna conspiración. Por eso hablaban de "sucesión constitucional" producto de que había una orden judicial de captura contra el mandatario, algo que ahora, a la luz de los cables de WikiLeaks, queda como un argumento falso.

Ejército hondureño aceptaba un retorno condicionado de Zelaya

Jimena Aguilar

Publicado el 31 de Mayo de 2011
Menos de tres semanas después del golpe, los militares temían que los políticos que habían fraguado el golpe los dejaran solos. Por eso consideraban la posibilidad de apoyar un retorno condicionado de Zelaya, y confesaron a la embajada estadounidense su convicción de que "habían sido manipulados por todas las partes" para derrocar al presidente.
Menos de tres semanas después del golpe de Estado en Honduras, el 17 de julio de 2009, la embajada de Estados Unidos mantenía reuniones con actores clave de la crisis política, en un intento por lograr un acuerdo que permitiera el retorno de Manuel Zelaya a la presidencia, en el marco del pacto que promovía el presidente costarricense Óscar Arias. En ese esfuerzo, el embajador Hugo Llorens habló con el jefe del Estado Mayor de la Fuerza Armada hondureña, general Romeo Vásquez Velásquez, quien le aseguró que estaba dispuesto a apoyar el regreso condicionado de Zelaya.
Bajo instrucciones del Departamento de Estado de Estados Unidos, según muestran cables firmados por Llorens, este mantenía reuniones con figuras hondureñas de la política, la sociedad civil y de negocios, con el fin de convencerlas de que respaldaran el plan de Arias. “Es de fundamental importancia que el régimen de facto de Micheletti entablara serias negociaciones en la próxima mediación liderada por el presidente Arias el 18 de julio en San José“, dice un cable fechado el 17 de julio.
En la información que Llorens enviaba al Departamento de Estado se refleja un Vásquez preocupado por convencer a Estados Unidos de que la actuación de los militares en el golpe había sido producto de una manipulación, pero también aparentemente mintiendo al asegurar que había una orden de captura contra Zelaya, puesto que tanto la Fiscalía como la Corte Suprema habían confesado a la embajada que esa orden nunca se giró. Vásquez había sido despedido por Zelaya cuatro días antes del golpe de Estado del 28 de junio por rehusarse a colaborar con el referendo que promovía el presidente.
En la reunión del día 17 de julio, el embajador le reiteró al ya restituido Vásquez que la posición del gobierno de Estados Unidos era que se restituyera el orden democrático y constitucional y que por lo tanto se reestableciera a Zelaya como el presidente legítimo de Honduras. Para la embajada la mejor opción para lograr esto era llegar a una solución negociada a través del Acuerdo de San José ya que este también tomaba en cuenta las preocupaciones de los opositores de Zelaya.
La reacción de Vásquez ante la posición de Estados Unidos fue defender su participación en el golpe, argumentando que los militares solo habían seguido órdenes de la Corte Suprema. Pero su posición cambió durante la conversación. “Al final, dijo él (Vásquez), que las Fuerzas Armadas de Honduras habían sido manipuladas por todas las partes“, se lee en el cable 217183, firmado por el embajador.
Luego, Vásquez llega a ponerse del lado del presidente derrocado y asegura que solo participó en el golpe por órdenes de la Corte Suprema. “Él (Vásquez) dijo que siempre había sido leal al presidente Zelaya, pero que la orden de la Corte Suprema era constitucional“, dice el texto del cable. En otro cable, Vásquez le aseguró al embajador que a pesar de las diferencias, consideraba a Manuel Zelaya como un amigo.
En la nota, donde se relata sobre la reunión con el jefe del Estado Mayor un día antes de las negociaciones en San José, el embajador menciona que Romeo Vásquez Velásquez, a menos de tres semanas del golpe, ya estaba dispuesto a apoyar el regreso de Zelaya bajo las condiciones sugeridas por Arias. “Vásquez expresó su voluntad de apoyar  una resolución negociada y la restitución de Zelaya, pero destacó que las Fuerzas Armadas estaban preocupadas de que los políticos civiles los convirtieran en el chivo expiatorio del golpe y la crisis“, se lee en el cable.
En esta misma reunión Vásquez le aseguró al diplomático que llevaría el mensaje de aceptar el Acuerdo de San José a Micheletti y su equipo. Sin embargo, el militar se lamentó ante Llorens que estos eran testarudos y agresivos y que continuaban endureciendo sus posiciones.
Mientras directivos de las Fuerzas Armadas se reunían con la emabajada y se mostraban abiertos al regreso condicionado de Zelaya, Roberto Micheletti, presidente de facto, se negaba a considerar esa opción. Micheletti aseguró en varias ocasiones que si Zelaya regresaba a Honduras “había una orden de captura en contra de él".
No fue hasta tres meses después del golpe cuando Micheletti aceptó por primera vez en público la posibilidad de un retorno. A finales de octubre dijo que el Congreso decidiera si Zelaya era restituido o no. Al Congreso le tomó un mes llegar a la decisión de rechazar el regreso de Zelaya.
El temor que las Fuerzas Armadas tenían a ser utilizados como chivo expiatorio por parte de los civiles involucrados en el golpe también salió a relucir en otros cables y era el principal motivo que estos argumentaban para dar apoyo al posible regreso de Zelaya. Los líderes del Congreso aseguraron en diferentes momentos y en diferentes entrevistas que los militares se habían sobrepasado al exiliar al presidente, pues la orden de la Corte era solo de captura. Esas expresiones, el parecer, hacían temer al ejército que si el golpe se revertía, los políticos terminaran responsabilizando a los militares.
El mismo día de la reunión con Vásquez, el embajador Hugo Llores desayunó con el ex presidente hondureño Ricardo Maduro. En un cable titulado “Quién es quién en el golpe de Honduras“ Llorens lo califica como una persona de alta influencia y de un rol potencialmente muy útil para la embajada ya que es muy respetado dentro de Honduras y en la comunidad de negocios internacional.
La mañana antes de la reunión en San José, el ex presidente hondureño le contó a Llorens que recientemente se había reunido con líderes militares. Estos le habían expresado que temían ser el chivo expiatorio de la crisis en el caso de que se llegara a un acuerdo político. Si esto sucedía, los militares dijeron estar dispuestos a apoyar a Zelaya.
“Líderes militares le dijeron a Maduro que estaban preparados para apoyar a Zelaya como su comandante en jefe, cualesquiera fueran sus órdenes, en el evento de que los militares fueran culpados por el golpe", se lee en un cable del 18 de julio de 2009 también firmado por Llorens.
En diferentes cables la embajada estadounidense menciona a los militares como un jugador clave en el escenario político después del derrocamiento, a pesar de que Llorens, en un cable donde hace un análisis de los sucecos del 28 de junio, califica de ilegal la actuación de los militares en el golpe. En esa misma nota, la embajada destaca que el asesor legal de las Fuerzas Armadas, Herberth Bayardo Inestroza, reconoció en unaentrevista de el 5 de julio para El Faro que los militares habían cometido un ilícito al remover a Zelaya.
Para la embajada estos reconocimientos públicos eran de gran valor porque los veía como un paso adelante en las negociaciones alrededor del acuerdo de San José y en el cable . Por ello, en un cable del 28 de julio el embajador resaltó como un gran paso adelante el que los militares hayan delcarado públicamente el 25 de julio su apoyo a un acuerdo negociado. En otro cable, Llorens destaca que Vásquez declaró públicamente su apoyo al acuerdo de San José.
Llorens creía que los militares, y especialmente Vásquez, estaban divididos en cuanto a cómo proceder en la crisis, sobre todo porque temían quedar como los villanos de la historia, como comenta en el cable 217183. Según el análisis de Llorens, Vásquez veía en Estados Unidos una guía para salir del problema y por ello confiaba en que llevaría el mensaje de la embajada a Micheletti.
Sobre todo, la embajada creía que debía mantener informados a los militares sobre el desarrollo de las negociaciones. “Cualquiera sea el trato que se haga, para que este sea exitoso, se tienen que mantener informados a los líderes militares“, comentó Llorens en el mismo cable.

Zelaya celebra la reincorporación de Honduras a la OEA

TEGUCIGALPA, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente de Honduras Manuel Zelaya ha celebrado la reincorporación del país centroamericano a la Organización de Estados Americanos (OEA), de la que fue expulsado tras el golpe de Estado del 28 de junio de 2009, al considerar que es el punto de partida de la transformación democrática.

En una entrevista concedida a la cadena TeleSur, Zelaya ha subrayado que la readmisión en el bloque regional es fruto de los esfuerzos coordinados del presidente hondureño, Porfirio Lobo, y de los de Colombia y Venezuela, Juan Manuel Santos y Hugo Chávez, respectivamente, que han servido de mediadores en este proceso, así como de los suyos propios.
   "Estamos de acuerdo con el principio que hoy alimenta los pueblos del mundo, que es buscar justicia, paz y reconciliación. El retorno de Honduras al concierto interamericano de naciones de la OEA es producto del esfuerzo colectivo para la reconciliación democrática", ha dicho.

El ex mandatario ha considerado que la normalización de las relaciones de Honduras con sus vecinos regionales y con la comunidad internacional es el primer paso para iniciar una transformación, como la que intentó impulsar cuando fue derrocado. "Somos conscientes de la responsabilidad en la construcción del proceso democrático", ha indicado.

En concreto, se ha referido al proyecto de Chávez en Venezuela como modelo de este cambio, subrayando la importancia de acabar con las políticas neoliberales causantes de la crisis económica a nivel mundial y de llevar a cabo una reforma constitucional, motivo que impulsó el alzamiento en su contra.
   En relación a esta última cuestión ha señalado que Lobo ha impulsado una reforma de la Carta Magna similar a la que él quiso desarrollar, con la diferencia de que ha contado con el apoyo casi unánime del Parlamento, que durante el mandato de Zelaya era de mayoría opositora.

RESPETO AL 'NO' DE ECUADOR

No obstante, Zelaya ha expresado su respeto a la postura adoptada por Ecuador, único país que se ha opuesto a la readmisión de Honduras en la OEA, al considerar que el regreso del ex presidente no garantiza el cumplimiento íntegro del acuerdo suscrito con Lobo para la normalización de la vida política.

En este sentido, se ha mostrado comprensivo, ya que el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, fue víctima el pasado 30 de septiembre de un intento de golpe de Estado en su contra, iniciado por un sector de la Policía, que llegó a retenerle en un hospital capitalino durante más de diez horas.

Lobo ve cumplida promesa de regreso a la OEA y aboga por la paz de Honduras

"Veo un paso muy importante de todos que le pongan fin a un aislamiento de un pueblo que no tiene ninguna responsabilidad en lo que ha sucedido", enfatizó Lobo en un mensaje en cadena nacional de radio y televisión tras conocer la aprobación del retorno de su país a la OEA, con la única oposición de Ecuador.
El regreso de Honduras a la OEA y la reconciliación entre los hondureños después del golpe de Estado del 28 de junio de 2009 al entonces presidente, Manuel Zelaya, son algunas de las promesas de campaña de Lobo cuando buscaba la Presidencia, que ganó en las elecciones de noviembre de ese mismo año.
"Yo agradezco la voluntad expresada hoy por todos los países en la Organización de Estados Americanos, incluso agradezco a Ecuador su posición franca y no haber respaldado, ni haber dado su voto por el regreso de Honduras", subrayó el gobernante.
Honduras fue suspendida de la OEA el 4 de julio de 2009, tras la ruptura del orden constitucional del país centroamericano, que había retornado a la democracia en 1982 tras casi dos décadas de regímenes militares.
Lobo, quien siguió por televisión en la Casa Presidencial el desarrollo de la asamblea extraordinaria de la OEA reiteró que trabajará por la defensa de los derechos humanos y abogó porque el camino de su país sea "la paz, la reconciliación y el perdón".
"Gracias a todos los países de América por la resolución del día de hoy, de devolver a Honduras su derecho de ser parte del concierto de naciones de nuestra América", recalcó el gobernante en su mensaje.
En su opinión, la reconciliación y la unidad de los hondureños es necesaria para que su país supere los problemas de desempleo, inseguridad y falta de educación, entre otros, y se encamine al desarrollo.
En materia de política interna, reiteró que su compromiso con el pueblo hondureño termina el 27 de enero de 2014, cuando concluye su mandato de cuatro años, y se pronunció a favor del derecho que tienen los hondureños a ser consultados mediante las figuras del referéndum y el plebiscito.
"No vamos a promover ni vamos a imponer nada, será el pueblo que va a decidir. Y eso sí, vamos a apoyar que se respete el derecho del pueblo a ser consultado y a tomar decisiones", enfatizó.
Zelaya fue depuesto cuando promovía una consulta popular para reformar la Constitución, aún cuando tenía impedimentos legales, una iniciativa en la que ha insistido tras su regreso al país el sábado pasado tras casi año y medio de exilio.
Tras conocer la decisión de hoy de la OEA, Lobo anunció el nombramiento de Jorge Ramón Hernández como nuevo embajador de su país ante el organismo continental.
Hernández compaginará esta función en Washington con la de embajador de Honduras ante el gobierno de Estados Unidos.
Además, el canciller hondureño, Mario Canahuati, confirmó desde Washington que Brasil ha solicitado el beneplácito para su nuevo embajador en Tegucigalpa, y que lo mismo está haciendo Honduras con países con los que las relaciones diplomáticas estaban suspendidas desde junio de 2009.
Por su parte, el ex presidente Zelaya, en declaraciones a la cadena de televisión Telesur, dijo que el acuerdo logrado y el regreso de su país a la OEA es "una derrota de la derecha" y aseguró que la decisión de Ecuador de votar en contra es "totalmente coherente" con la situación en ese país.
El Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) expresó su satisfacción por el retorno de Honduras a la OEA, mientras que el presidente de la Corte Centroamericana de Justicia, el hondureño Francisco Lobo, calificó de "positiva" la resolución del organismo continental.
A Lobo, según sus propias palabras, ahora lo que le interesa es que los hondureños no miren atrás, sino hacia adelante, y pasar la página de los sucesos derivados del golpe de Estado a Zelaya, cuyo retorno al país el sábado pasado se produjo gracias a una mediación respaldada por Colombia y Venezuela. EFE gr/hma/rma